Los padres con frecuencia se preocupan cuando sus niños no pueden comer o retener los alimentos o líquidos. Muchas enfermedades leves pueden causar "mal de estómago" o una incapacidad para retener los alimentos. A veces, las náuseas y el vómito pueden ser signos de una afección más grave. Guíese por este cuadro para obtener más información acerca de estos problemas.