Hogar dulce hogar. No hay lugar como este. Es posible que usted se sienta más cómodo cuando está en su casa, pero tenga en cuenta que también existen peligros en su hogar. Puede cortarse con un cuchillo de cocina u otra herramienta doméstica. Quizás se queme la mano al sacar algo del horno o al manipular una sartén caliente sobre la estufa. La mayoría de las veces, estas lesiones comunes en el hogar son leves. Eso significa que puede ser tratadas en casa sin consultar a su médico. Los artículos que necesita para estos tratamientos se pueden encontrar en un botiquín de primeros auxilios en casa.
El camino hacia una mejor salud
Cortes y raspaduras
Los cortes y raspaduras son heridas comunes en el hogar que pueden ocurrir en cualquier momento y por muchas razones. Pero no hay necesidad de entrar en pánico si usted se lastima de esta manera.
Primero lávese las manos. Incluso antes de tocar la herida, lávese bien las manos con agua y jabón. Esto eliminará la suciedad de sus manos. Usted quiere tener las manos limpias para no añadir de manera accidental suciedad que más tarde puede infectar la herida.
Detenga el sangrado. Si la herida está sangrando, usted deberá detener el sangrado. Coloque y presione suavemente algún tipo de tela, como un paño limpio o una gasa, sobre la herida. No presione demasiado, ya que esto puede hacer que la herida duela más de lo que ya le duele. Luego, mientras mantiene la herida cubierta, levántela por encima del nivel de su corazón, si es posible. Esto puede ayudar a detener el sangrado. Aplique presión durante varios minutos. Además, no levante la tela con frecuencia para ver si el sangrado se ha detenido. Si lo hace, es posible que la herida continúe sangrando durante más tiempo.
Limpiar la herida. Una vez que el sangrado se haya detenido, debe lavar la herida. Esto puede resultar doloroso, pero es un paso muy importante. Haga esto colocando la herida bajo el chorro de agua. El agua ayudará a eliminar la suciedad o los residuos en la herida. Después de lavarlo, observe la herida. Si aún ve residuos, trate de quitarlos con cuidado con unas pinzas que previamente hayan sido sumergidas en alcohol isopropílico. (Nota: No debe utilizar peróxido de hidrógeno para limpiar la herida). Una vez que la herida esté limpia, lave suavemente la piel circundante con agua y jabón. Presione ligeramente el área con un paño limpio, como una toalla, para secar toda el área.
Aplicar protección. Aplique una capa delgada de pomada antibiótica (un nombre de marca: Neosporin) o vaselina (un nombre de marca: Vaselina) en la herida. Esto ayudará a mantener la herida limpia, a evitar una infección y quizás a reducir las cicatrices. Luego cubra la herida para protegerla. Utilice un vendaje o gasa con un vendaje elástico. Este tipo de cubierta en ocasiones es llamada apósito. Debe volver a aplicar la pomada o vaselina y cambiar el apósito a diario.
Vigile que no haya infección. Cuando cambie el apósito, busque signos de infección en la herida. Los síntomas incluyen hinchazón, enrojecimiento y más dolor que cuando ocurrió la herida. Con el paso del tiempo, su herida desarrollará una costra. Esa es la forma natural en la que se protege a si misma. Una vez que se desarrolla la costra, ya no es necesario colocar ningún tipo de vendaje. Y evite la tentación de rascarse la costra.
Quemaduras en el hogar
Incluso si usted es cuidadoso, existe el riesgo de quemarse con algo en casa. Puede golpearse la mano contra la rejilla del horno al sacar la cena. O tal vez la grasa caliente lo puede salpicar mientras cocina. Si bien resultan dolorosas, este tipo de quemaduras a menudo se pueden tratar rápida y fácilmente siguiendo estos pasos.
Enfriarla. Naturalmente, una quemadura va a estar caliente. Usted necesita enfriarla. Inmediatamente después de quemarse, coloque la quemadura bajo el chorro de agua fría. También puede remojar la quemadura en un recipiente con agua fría, pero no helada. Dependiendo del tamaño de la quemadura y de cuánto duela, es posible que deba mantenerla debajo del agua entre 5 y 30 minutos. Mantener la quemadura bajo agua fría también ayudará a reducir la inflamación que pueda presentarse. Si la quemadura está en su dedo, quítese los anillos lo antes posible antes de que comience la inflamación.
Trate la quemadura. Después de remojar la quemadura, seque suavemente palmeando el área con un paño suave y limpio. No presione con fuerza, ya que la quemadura probablemente sea dolorosa. Luego aplique una capa fina de pomada antibiótica (un nombre de marca: Neosporin) o vaselina (un nombre de marca: Vaselina) a la quemadura. Estos ayudarán a evitar que la quemadura se infecte. También puede aplicar gel de aloe vera para ayudar a mantener fresca la quemadura.
Protegerla. Una vez que trata la quemadura, utilice un vendaje o gasa estéril para cubrirla. Cubrirla ayudará a que el tratamiento se mantenga sobre la quemadura y a protegerla de una infección. Asegúrese de que el vendaje esté lo suficientemente ajustado para evitar que se caiga, pero no tanto que presione la quemadura. Cambie el vendaje todos los días.
Tratar el dolor. Las quemaduras a menudo son dolorosas. Usted puede ayudar a aliviar algo de ese dolor tomando medicamentos de venta libre. Ibuprofeno (un nombre de marca: Advil), acetaminofén (un nombre de marca: Tylenol) o naproxeno (un nombre de marca: Aleve) puede ayudar. Estos medicamentos también pueden reducir la inflamación que causa una quemadura. Nota: No le administre estos medicamentos a niños menores de 12 años sin consultar primero a su médico.
No toque las ampollas. A medida que las quemaduras cicatrizan, a veces desarrollan ampollas con líquido en su interior. Es posible que usted sienta la tentación de romper la ampolla para dejar salir el líquido. Pero no lo haga. Las ampollas en realidad protegen la quemadura de una infección. Si una ampolla se rompe por sí sola, límpiela colocándola bajo un chorro de agua fría. Una vez seca, aplique una pomada antibiótica y cúbrala con una venda para mantenerla segura y ayudar a evitar infecciones.
Aspectos a tener en cuenta
En algunos casos, necesitará visitar a su médico para tratar una herida. Algunos ejemplos incluyen si la herida no deja de sangrar, si puede ver el músculo y la grasa a través de la herida, si no puede eliminar toda la suciedad y los residuos o si la herida fue causada por la mordedura de un animal. En todos estos casos, debe llamar a su médico de inmediato.
Algunas quemaduras en el hogar también necesitan la atención de su médico. Estos tipos de quemaduras generalmente cubren un área mayor a 3 pulgadas de piel y son más graves que las quemaduras menores. Algunos ejemplos de este tipo de quemaduras incluyen las causadas por agua hirviendo, al poner la mano sobre una estufa caliente o una llamarada grande de su parrilla al aire libre.
Algunas heridas y quemaduras pueden requerir una vacuna de refuerzo contra el tétanos. Si su herida es grande, profunda o fue causada por algo oxidado, verifique su registro de vacunación para saber cuándo fue la última vez que recibió la vacuna contra el tétanos. También verifique su registro de vacunación en caso de que tenga una quemadura que desarrolla una ampolla. Si han pasado más de 5 años desde su última vacuna contra el tétanos, comuníquese con su médico para recibir una vacuna de refuerzo.
Recursos
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Esta información proporciona una visión general y puede que no se aplique a todos. Hable con su médico de familia para averiguar si esta información se aplica a usted y para obtener más información sobre este tema.