La telemedicina es una manera de que los pacientes tengan acceso a la atención médica sin salir de sus hogares o de sus empleos. El médico y el paciente se encuentran en dos lugares completamente separados, pero pueden comunicarse directamente utilizando la tecnología. Normalmente, esto implica videoconferencias o una comunicación telefónica.
Siempre que se sigan los estándares de atención adecuados, la Academia Estadounidense de Médicos de Familia (AAFP, por sus siglas en inglés) apoya el uso de la telesalud y telemedicina para mejorar la salud. (La telesalud es diferente de la telemedicina. La telesalud se refiere a los servicios de salud no clínicos que pueden involucrar a enfermeros, trabajadores sociales, farmacéuticos, etc. La telemedicina es la atención que usted recibe de su médico de cabecera).
La pandemia del COVID-19 que comenzó a principios de 2020 ha hecho que la telemedicina sea más importante que nunca. En un momento en el que salir de la casa los coloca en riesgo de exponerse a un virus potencialmente peligroso, los pacientes aún pueden consultar a sus médicos desde la seguridad de sus propios hogares.
La telemedicina también resulta beneficiosa para los pacientes que no pueden trasladarse fácilmente al consultorio de un médico o que cuentan con poco tiempo.
El camino hacia un mayor bienestar
La telemedicina comenzó como una forma de atender a las poblaciones rurales con acceso limitado a médicos. Está ganando popularidad en todas partes debido a las ventajas que ofrece. Estas incluyen:
- Hacer más con menos. Los médicos están ampliando su capacidad para llegar a los pacientes más allá de su consultorio «físico».
- Comodidad. No tiene que viajar a un consultorio cada vez que necesite atención. Puede ver al médico desde su casa, su automóvil o su lugar de trabajo. Si cuenta con una computadora o un teléfono inteligente, su médico está a solo un clic de distancia.
- Acceso a una atención de calidad. Si vive en un área remota, sus opciones de acceso a médicos pueden resultar limitadas. Esto le abre la puerta a más médicos y más especialistas.
- Mejor manejo de las enfermedades crónicas. Puede que le resulte más fácil asistir a sus citas debido a la comodidad que ofrece la telemedicina.
- Sin tiempos de espera y salas de espera abarrotadas. La telemedicina le permite concertar una cita por enfermedades urgentes desde su casa. De esa manera, no estará atrapado en una habitación con otras personas enfermas esperando ser atendidas. Es posible que aún deba ser visto en persona, dependiendo de su enfermedad o lesión, y una visita de telemedicina los ayudará a usted y a su médico a decidir si deben buscar atención adicional y dónde.
La mayoría de los proveedores de seguros, incluido Medicaid, permiten el uso de la telemedicina. Usted debe consultar a un médico o especialista que cuente con una licencia médica válida en su estado. Averigüe si su seguro cubrirá una visita de telemedicina y si tendrá que pagar algo de su bolsillo.
¿Cuándo me puede ayudar la telemedicina?
La telemedicina puede ayudar con una variedad de enfermedades, síntomas o incluso aprender más sobre su salud en general. Es posible que pueda hablar virtualmente con su médico sobre:
- Alergias
- Artritis
- Asma, infecciones respiratorias y sinusitis
- Infecciones de vejiga y tracto urinario
- Bronquitis
- Resfriados y gripe
- Diarrea o estreñimiento
- Educación sobre su salud
- Fiebre
- Dolores de cabeza
- Infecciones
- Picaduras de insectos
- Molestias y dolor articular
- Manejo de afecciones de salud crónicas como diabetes, artritis reumatoide, depresión y enfermedad coronaria
- Manejo de medicamentos
- Preguntas médicas
- Conjuntivitis
- Erupciones, infecciones o inflamación
- Pequeñas heridas y cortes
- Dolor de garganta
- Lesiones deportivas u otras lesiones físicas
- Esguinces o tensiones musculares
- Apoyo para la toma de decisiones médicas
- Resultados de pruebas
- Vómitos, acidez y náuseas
Hablar de su plan de atención
Su médico de cabecera puede tratar afecciones adicionales mediante telemedicina. Hable con su médico de familia para ver si puede ser atendido por telemedicina.
La telemedicina ofrece acceso a la atención en situaciones en las que, de otro modo, sería difícil ver a un médico. Algunos ejemplos incluyen:
- Usted está de vacaciones o en viaje de trabajo. (Su médico debe tener una licencia en el estado en el que se encuentra durante el viaje).
- Necesita una cita fuera del horario habitual del consultorio.
- No tiene a nadie que cuide de sus hijos pequeños en casa.
- Necesita de inmediato surtir una receta de nuevo.
- No puede ausentarse del trabajo.
- Le resulta difícil viajar hasta el consultorio de su médico.
- Usted no quiere arriesgarse a la exposición a gérmenes en el consultorio físico de un médico.
- Está cuidando a un ser querido anciano que es frágil o tiene demencia, lo que dificulta llevarlo a un consultorio.
¿Cómo hago una cita de telemedicina con mi médico?
Debería poder programar una cita llamando al consultorio de su médico y solicitando una cita de telemedicina. También puede programar una cita en línea a través del sitio web de su médico o utilizando un portal para pacientes. Una vez que programe su cita, el consultorio le enviará instrucciones sobre cómo conectarse con su médico en línea. Es posible que deba descargar una aplicación de videoconferencia antes de su cita. Las instrucciones del consultorio de su médico lo guiarán.
La telemedicina le permite acceder a la atención médica sin salir de casa. Pero no es la opción correcta para todas las visitas a su médico. Read More
Aspectos a tener en cuenta
Si bien la telemedicina cuenta con muchos aspectos positivos, no es la única solución para todos. Existen ocasiones en las que puede ser preferible ir al consultorio físico de su médico. No todos los exámenes se pueden realizar de forma remota, y es posible que deba ir a un consultorio para un análisis de laboratorio u otra prueba antes de su visita de telemedicina. Y a veces, la tecnología tiene sus inconvenientes. Necesitará una conexión a Internet de alta velocidad confiable para las visitas por video. Es posible que su médico no pueda ver claramente algunos signos físicos, como afecciones de la piel, utilizando una computadora estándar o la cámara de un teléfono. Además, su médico no puede escuchar su corazón, pulmones o identificar su área exacta de sensibilidad, lo que le ayudará a diagnosticarlo. En estos casos, puede ser mejor consultar a su médico de manera presencial. Es probable que las emergencias médicas y los casos difíciles también requieran una visita en persona.
Preguntas para hacerle a su médico (o al personal del consultorio de su médico)
- ¿Su consultorio ofrece telemedicina?
- ¿Qué tan rápido puedo programar una cita virtual?
- ¿Cuánto tiempo debo esperar que dure mi cita?
- ¿Mi seguro la pagará?
- ¿Habrá algún tipo de copago?
- Para mi afección, ¿sería más útil ver al médico en persona?
Este artículo cuenta con el respaldo parcial de una subvención de Takeda Pharmaceuticals U.S.A. inc.