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Asma

Última actualización octubre 2022 | Este artículo fue creado por el personal editorial de familydoctor.org y revisado por Daron Gersch, MD, FAAFP

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¿Qué es el asma?

El asma es una enfermedad crónica (de largo plazo) de los pulmones. Inflama y estrecha las vías respiratorias, lo que dificulta la respiración. Las vías respiratorias son tubos que transportan aire hacia adentro y hacia afuera de los pulmones. La mayoría de las veces comienza en la infancia, pero puede afectar a personas de todas las edades.

Las vías respiratorias de las personas que tienen asma son muy sensibles a aquellas cosas a las que son alérgicas (alérgenos). También son sensibles a determinadas sustancias que se pueden inhalar a través del aire.

Los síntomas del asma comienzan cuando los irritantes hacen que el revestimiento de las vías respiratorias se inflame (hinche) y se estreche. Los músculos alrededor de las vías respiratorias pueden sufrir espasmos (contraerse rápidamente). Esto hace que las vías respiratorias se estrechen aún más. Cuando el revestimiento de las vías respiratorias está inflamado, produce más mucosidad. La mucosidad obstruye las vías respiratorias y bloquea aún más el flujo de aire. Cuando estos síntomas son graves y no se pueden controlar fácilmente, se denomina «ataque de asma».

Síntomas del asma

Un «brote» o ataque de asma ocurre cuando el exceso de mucosidad hace que los conductos de aire se inflamen y se contraigan. Los ataques de asma pueden ser leves, moderados o graves. Los síntomas de un ataque de asma incluyen los siguientes:

  • Tos. La tos por asma suele empeorar temprano por la mañana y por la noche. Esto puede provocar problemas para dormir.
  • Opresión en el pecho. Puede sentirse sin aliento y como si algo le oprimiera el pecho.
  • Sibilancias. Un sonido ronco, chirriante, musical o silbante al respirar.
  • Tos con mucosidad.

Los ataques de asma graves pueden poner en peligro su vida. Consulte a su médico de inmediato si nota alguno de los siguientes problemas o todos. Es posible que le pida que busque atención de emergencia de inmediato.

  • Su medicamento de rescate no alivia sus síntomas.
  • Las uñas o labios se vuelven grises o azules.
  • Tiene problemas para caminar o hablar.
  • Tiene dificultad extrema para respirar.
  • El cuello, pecho o costillas se contraen con cada respiración.
  • Las fosas nasales se ensanchan cuando respira.
  • Los latidos o pulso son muy rápidos.

¿Qué causa el asma?

No se ha determinado la causa exacta del asma. Los científicos y los investigadores creen que las causas genéticas y ambientales conducen al asma. Estas pueden incluir:

  • Uno o ambos padres tienen asma.
  • Antecedentes genéticos de alergias en la familia.
  • Tener ciertas infecciones respiratorias durante la niñez.
  • Contacto con alérgenos o infecciones durante la infancia y la niñez, cuando el sistema inmunológico aún está en desarrollo.

Muchas cosas pueden hacer que su asma se agrave, entre ellas:

  • alergias
  • infecciones virales (como un resfriado) e infecciones de los senos nasales
  • tabaco
  • contaminantes del aire (como el humo de leña)
  • aire frio
  • ejercicio
  • perfume o vapores químicos
  • acidez

Para algunas personas, las emociones fuertes o el estrés pueden desencadenar un ataque de asma. Preste atención a la forma en que estas cosas afectan su asma. Trabaje con su médico para averiguar qué cosas desencadenan su asma.

¿Cómo se diagnostica el asma?

Su médico le preguntará por su historial médico, especialmente cualquier antecedente familiar de alergias y asma. Mantenga un registro de sus síntomas de asma y de cuándo y con qué frecuencia ocurren. Su médico querrá saber qué parece desencadenar y empeorar sus síntomas.

También le realizará un examen físico. Escuchará su respiración y buscará signos de alergias y asma. Estos pueden incluir sibilancias, conductos nasales inflamados y afecciones alérgicas cutáneas (como eccema).

Le realizarán una prueba de espirometría. Respirará en una máquina llamada espirómetro para ver qué tan bien funcionan los pulmones. Registra la cantidad de aire y la rapidez con la que inhala y exhala. Es posible que su médico necesite realizar otras pruebas, como:

  • Pruebas de alergia.
  • Pruebas para descartar otras afecciones con síntomas similares al asma. Estas podrían incluir apnea del sueño o enfermedad por reflujo.
  • Radiografía de tórax o electrocardiograma para asegurarse de que no haya nada más en los pulmones (una enfermedad u objeto extraño) que esté causando los síntomas.

¿Se puede prevenir o evitar el asma?

El asma no se puede prevenir y no existe cura. Puede ayudar a evitar los ataques de asma si evita los desencadenantes que pueden iniciarlo. Entre los ejemplos de alérgenos e irritantes comunes están:

  • contaminación del aire
  • polvo
  • moho
  • polen
  • humo de tabaco
  • caspa de mascotas
  • ejercicio
  • cambios de temperatura
  • algunos alimentos
  • sulfito (conservante de alimentos en vino tinto, cerveza, ensaladas, sopas deshidratadas y otros alimentos)
  • acidez
  • emociones fuertes (como llorar o reír)
  • perfume
  • resfriados y virus

Tratamiento del asma

Su médico trabajará con usted para crear un plan de acción para controlar el asma. El plan incluirá reconocer sus síntomas y evitar los desencadenantes del asma. Le brindará orientación sobre cómo tomar los medicamentos correctamente. Su plan lo ayudará a realizar un seguimiento de su nivel y control, y a saber cuándo buscar atención de emergencia cuando sea necesario.

Su médico puede indicarle que use un medidor de flujo máximo para rastrear sus síntomas. Un medidor de flujo máximo es un dispositivo de mano que mide el índice de flujo espiratorio máximo (PEFR, por sus siglas en inglés). Esta es la rapidez con la que puede expulsar aire de los pulmones. Medir su flujo máximo con regularidad puede ayudarlo a saber si su asma está empeorando.

Los medicamentos para el asma se dividen en dos grupos: medicamentos de control (para prevenir ataques) y medicamentos de rescate (para tratar ataques). Su médico le hablará sobre estos medicamentos y qué debe hacer si tiene un ataque de asma. Pídale a su médico instrucciones escritas sobre cómo tomar los medicamentos. Los siguientes son ejemplos de los medicamentos que más comúnmente usan las personas que padecen asma:

Medicamentos de control (para prevenir ataques; en general se toman diariamente)

  • corticosteroides inhalados
  • inhaladores combinados
  • modificadores de leucotrienos

Medicamentos de alivio rápido (para tratar un ataque; en general, se toman cuando ocurre un ataque)

  • albuterol, pirbuterol, levalbuterol o bitolterol
  • ipratropio
  • esteroides orales (prednisona, prednisolona)

Vivir con asma

Con los tratamientos disponibles en la actualidad, la mayoría de las personas que padecen asma pueden controlar la enfermedad. Pueden tener pocos síntomas. Pueden llevar una vida normal y activa y dormir toda la noche sin interrupciones por el asma.

Es importante tratar los síntomas cuando los note por primera vez. Esto ayudará a prevenir un ataque de asma grave. Los ataques de asma graves pueden requerir atención de emergencia. Incluso pueden ser fatales.

Preguntas para hacerle a su médico

  • ¿Las pruebas de alergia ayudarían a determinar qué está causando los síntomas del asma?
  • ¿Qué cambios puedo hacer en casa para aliviar mis síntomas de asma o los de mi hijo?
  • ¿Es seguro hacer ejercicio y/o practicar deportes si tengo asma?
  • ¿Mi hijo dejará de tener asma cuando crezca?
  • ¿Qué información debo dar a la escuela de mi hijo sobre su tratamiento?

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