Preparación para la paternidad: Limpieza de biberones

Tener un bebé es un gran cambio de vida. Los bebés duermen mucho, usan muchos pañales y comen mucho. En general, los recién nacidos comen cada 2 a 3 horas, u 8 a 12 veces al día. A medida que crecen, la cantidad de veces que comen al día disminuirá, mientras que la cantidad que comen cada vez aumentará.

En una encuesta reciente de padres primerizos realizada por el Instituto Estadounidense de Limpieza, el 76 % de los padres mencionaron la limpieza de la cocina y la preparación para la limpieza/esterilización del biberón como las prioridades de limpieza e higiene más importantes cuando se preparan para recibir a un nuevo bebé en el hogar.

Incluso si elige amamantar, la mayoría de los padres usarán biberones en algún momento de la vida de sus hijos. Es extremadamente importante limpiar, desinfectar y almacenar correctamente los biberones y otros artículos de alimentación para mantener a su bebé sano y seguro. Los recién nacidos y los bebés pequeños son más vulnerables a los gérmenes y las enfermedades transmitidas por los alimentos porque sus sistemas inmunológicos no están completamente desarrollados.

El camino hacia una mejor salud

Los biberones deben limpiarse después de cada uso o alimentación. Si su bebé no termina un biberón, puede guardarlo en un lugar frío hasta por 2 horas, pero no más. Nunca enjuague y reutilice o agregue nueva fórmula o leche materna a un biberón sucio o ya existente. Debe limpiar y secar completamente los biberones para evitar el crecimiento de bacterias o gérmenes.

Cada biberón contiene múltiples componentes, incluidos el biberón en sí, la tetina, la tapa, el anillo y la válvula. Algunos de estos pueden ser aptos para lavavajillas o es posible que deba lavar las piezas a mano. A continuación, se presentan las pautas recomendadas para el cuidado adecuado de los biberones.

Limpieza

Antes de comenzar a limpiar, secar, desinfectar o guardar los biberones, lávese bien las manos con agua y jabón. Use una toalla de mano limpia o una toalla de papel para secarse las manos.

Retire y separe todas las partes del biberón, luego enjuague todo con agua corriente. Asegúrese de saber qué piezas solo se pueden lavar a mano y qué piezas se pueden lavar en el lavavajillas.

 Piezas aptas para el lavavajillas

Coloque todas las piezas del biberón aptas para lavavajillas en la rejilla superior. Puede ser útil colocar los artículos más pequeños, como tetinas o gorros, en una canasta o bolsa pequeña para evitar perderlos. Para hacer funcionar su lavavajillas, seleccione el ciclo de agua caliente y la configuración de secado o desinfección con calor. Esto ayudará a eliminar cualquier germen, bacteria o leche en polvo en las partes del biberón.

 Lavado a mano

No lave a mano los artículos directamente en el fregadero, ya que puede contener gérmenes existentes. Debe colocar las piezas en un recipiente o palangana que se use solo para artículos de alimentación para bebés. O puede limpiar el fregadero con agua caliente y jabón de antemano para eliminar los gérmenes.

Llene el área de lavado con jabón y agua caliente y frote cada artículo con un cepillo que se usa solo para limpiar biberones. La mayoría de las tiendas venden cepillos hechos para adaptarse específicamente a las diferentes partes del biberón. Una vez limpio, enjuague cada artículo una vez más con agua corriente para eliminar el exceso de jabón.

 Secado

Los artículos que se lavan a mano deben secarse al aire libre sobre un paño de cocina limpio, una toalla de papel o un botellero. Las partes de la botella aptas para lavavajillas también deben estar completamente secas antes de guardarlas para su uso posterior. No seque manualmente ningún artículo con una toalla o un paño porque los gérmenes pueden transferirse de esta manera. Más bien, déjelos secar al aire en un espacio limpio.

Higienización

La desinfección también es una parte importante del proceso de limpieza de biberones. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan higienizar todas las partes del biberón al menos una vez al día cuando su bebé tiene menos de 2 meses. Los médicos pueden alentarlo a hacerlo con más frecuencia si su bebé es prematuro o tiene un sistema inmunitario debilitado.

Algunos lavavajillas tienen un ciclo de higienización que puede usar. Si no, hay varios otros métodos entre los que puede elegir.

• Hervor: Coloque las partes individuales del biberón o los artículos de alimentación en una olla grande y cúbralos con agua. Lleve el agua a ebullición. Después de 5 minutos, apague el quemador y retire los artículos con un utensilio limpio, como pinzas. Deje que todos los artículos se sequen al aire en un espacio limpio antes del próximo uso.
• Vapor: Coloque las partes individuales del biberón o los artículos de alimentación en un microondas o dispositivo de vapor. Siga las instrucciones del aparato para desinfectar, enfriar y secar las piezas.
• Lejía: Este método solo debe usarse si todos los demás no están disponibles. En un recipiente limpio, mezcle una solución de 2 cucharaditas de lejía sin perfume por cada galón (16 tazas) de agua. Coloque las piezas individuales del biberón o los elementos de alimentación en el recipiente. Asegúrese de que estén completamente cubiertos con la solución y déjelos en remojo durante al menos 2 minutos. Retire los artículos con un utensilio limpio, como pinzas, y colóquelos en un espacio limpio para que se sequen al aire antes del próximo uso.

 Almacenamiento

Lávese las manos con agua y jabón antes de manipular cualquier artículo de alimentación. Una vez que todas las partes estén completamente secas, vuelva a armar las botellas y guárdelas en un lugar limpio y seguro. Esto ayudará a prevenir la contaminación.

Aspectos para tener en cuenta

Además de las piezas del biberón, es posible que deba usar otros elementos durante el proceso de alimentación del bebé. Estos podrían incluir una jeringa de alimentación o una cuchara de fórmula. También necesitará limpiar regularmente todas las partes de un extractor de leche, si lo usa. Básicamente, todo lo que entre en contacto con la leche materna o la fórmula preparada debe limpiarse, secarse, desinfectarse y almacenarse siguiendo las recomendaciones anteriores. Una cuchara que se usa para medir la fórmula seca solo necesita limpiarse si se ensucia o se contamina.

No olvide que también debe limpiar los cepillos, recipientes y rejillas que utiliza para limpiar y secar las botellas. Esto mantiene todo higiénico y libre de gérmenes.

Preguntas para hacerle a su médico

• ¿Necesito desinfectar las piezas del biberón o del extractor de leche antes de usarlos por primera vez?
• ¿Hay algún momento en el que necesite tirar ciertas partes de la botella y obtener otras nuevas?

Recursos

American Cleaning Institute’s Clean Bottle Guide

Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades: Infant Feeding Hygiene