Los niños tienen mucho en sus vidas hoy en día. Tienen la escuela, actividades, vida familiar y tareas domésticas. Los adolescentes pueden estar aprendiendo a equilibrar tener un trabajo también. Tal vez su hijo esté lidiando con la presión de los compañeros o los compañeros intimidadores. Pueden estar experimentando problemas importantes en sus vidas, como un divorcio o una gran mudanza. Para muchos niños, equilibrar la vida y la tarea puede ser estresante.
El camino hacia un mayor bienestar
La Asociación Nacional de Educación (NEA, por su sigla en inglés) respalda una norma de «regla de 10 minutos» para la tarea. Esto significa 10 minutos de tarea por nivel de grado por noche. Algunos estudios recientes han demostrado que los estudiantes estadounidenses reciben 3 veces más tareas que las recomendadas. Otros estudios muestran que están recibiendo la cantidad justa para tener éxito.
¿Cómo sabe cuándo su hijo está recibiendo «demasiada» tarea? Su hijo:
- ¿Derrama lágrimas por la cantidad de tarea que tiene?
- ¿Se quedó hasta tarde trabajando en las tareas en muchas ocasiones?
- ¿Perdió eventos familiares o escolares importantes o usó mucho tiempo del fin de semana para completar la tarea?
- ¿Comenzó a mostrar signos de estrés físicos, emocionales o de comportamiento relacionados con hacer su tarea?
Demasiado estrés puede afectar la forma en que un niño actúa, siente y piensa. Dependiendo de la edad de su hijo, los signos de estrés pueden incluir:
- dolores de cabeza
- disminución o aumento del apetito
- problemas para dormir
- pesadillas
- hábito recurrente o nuevo de mojar la cama
- dolor de estómago
- preocupación, ansiedad
- tensión, incapacidad para relajarse
- miedos nuevos o recurrentes
- aferrarse, no desea que usted se aleje de él
- ira, llanto, quejas
- emociones incontroladas
- comportamiento agresivo u obstinado
- falta de voluntad para participar en actividades familiares o escolares
Aspectos a tener en cuenta
El estrés de administrar la tarea puede afectar a toda la familia. Es importante comunicarse con su hijo y escuchar sus sentimientos. Si su hijo se siente abrumado e incapaz de mantenerse al día con sus tareas, hay cosas que puede hacer para ayudar.
- Repase cómo y dónde su hijo está completando la tarea. ¿Está libres de distracciones?
- Revise el horario de su hijo. ¿Está demasiado ocupado? Puede ser hora de eliminar algunos compromisos.
- Proporcione un entorno seguro y tranquilo para que su hijo complete la tarea.
- Establezca expectativas y rutinas claras para la tarea al comienzo del año escolar.
- Anime a su hijo a tomar descansos cuando sea necesario y a tomarse un tiempo para relajarse.
- Aliente la actividad física.
- Asegúrese de que su hijo duerma lo suficiente.
- Permita que su hijo tome decisiones y tenga cierto control sobre cómo, cuándo y dónde se hace su tarea.
Es posible que usted no pueda controlar la cantidad de tarea que le asignan a su hijo. Es importante comunicarse con su hijo y escuchar sus sentimientos. Si siente que su hijo está abrumado por la tarea, tenga una conversación con su(s) maestro(s). Describa los problemas que está teniendo. Pida consejos para hacer que el proceso de tarea fluya mejor.
Si siente que ha hecho todo lo posible para ayudar a su hijo y todavía se siente estresado, puede ser momento de pedir ayuda. Su médico de cabecera puede ayudarlo a idear un plan para que su hijo maneje mejor su estrés.
Preguntas para hacerle a su médico
- ¿De qué maneras puedo ayudar a mi hijo a manejar los síntomas físicos de su estrés?
- ¿Qué hábitos saludables puedo alentar para ayudar a mi hijo a controlar el estrés?
- ¿Cómo sé que mi hijo está durmiendo lo suficiente?