VIH significa virus de inmunodeficiencia humana. Es una infección que ataca el sistema inmunitario del cuerpo. La infección puede causar el SIDA (síndrome de inmunodeficiencia adquirida).
Los trabajadores de la salud están en un mayor riesgo de exposición al virus en el lugar de trabajo. El VIH se transmite a través de ciertos fluidos corporales de una persona infectada. Estos incluyen sangre, semen, flujo vaginal o leche materna. Otros líquidos, como lágrimas, saliva, sudor y orina, contienen poco o ningún virus y no pueden transmitir el VIH a menos que se mezclen con sangre.
El riesgo de contraer el VIH a causa de una lesión por un pinchazo de aguja es menor al 1 %. El riesgo de exposición por contacto directo de la piel con el fluido es menor al 0.1 %. El riesgo de infección a partir de una mordedura humana es de entre 0.1 % y 1 %.
El camino hacia una mejor salud
Hay muchas maneras de prevenir la exposición ocupacional al VIH. Para empezar, los trabajadores de la salud deben tratar a todos los fluidos corporales de la misma manera. Se debe asumir que están infectados y tomar precauciones:
- Use una cubierta protectora, como guantes y gafas. Siempre debe hacer esto cuando trabaja con sangre y fluidos corporales.
- Lávese las manos y otras áreas de la piel justo después del contacto con sangre y fluidos corporales.
- Tenga cuidado al manipular y desechar las agujas y los instrumentos afilados.
- Utilice los dispositivos de seguridad disponibles para evitar lesiones por pinchazos.
- Conozca los procesos posteriores a la exposición de su empleador.
Si ocurre una exposición, siga estos pasos básicos:
- Para una punción en la piel, provoque el sangrado en el sitio de la herida. Para ello, aplique una presión suave alrededor de la herida mientras se lava el área con agua y jabón.
- En caso de una salpicadura de piel o mucosa, lave bien la zona con agua.
- Obtenga información de la persona infectada. Esto incluye nombre, dirección, número de teléfono, y el estado del VIH. Si es un paciente, obtenga la información de contacto de su médico.
- Notifique a su supervisor y compañeros de trabajo. Si su lugar de trabajo tiene otros procedimientos establecidos, sígalos (notificación de incidentes, etc.).
- Busque atención médica inmediata. Vaya a la unidad de salud para empleados, al servicio de urgencias o a su médico personal.
Una vez que esté con profesionales médicos, estos evaluarán la exposición. Si tiene un pinchazo o corte en la piel, es posible que también necesite un refuerzo del toxoide tetánico. Las siguientes son algunas preguntas que un médico puede hacer sobre la exposición.
Para una punción en la piel:
- ¿Es superficial o profunda?
- Si fue causada por una aguja, ¿de qué diámetro era? ¿La aguja era sólida (de sutura) o hueca?
- Si fue causada por un instrumento, ¿qué era?
- ¿Había sangre o material con sangre en la superficie del objeto?
- ¿El objeto estuvo en contacto previo con los fluidos corporales de la persona infectada?
- Si se inyectó sangre, ¿cuánta?
- ¿Estaba usando una cubierta protectora?
Para salpicaduras de piel o mucosa:
- ¿A qué tipo de fluido corporal estuvo expuesto y cuánto?
- ¿En qué parte de su cuerpo estuvo expuesto?
- ¿Cuál es el tamaño del área de contacto?
- ¿Cuánto tiempo duró el contacto?
- ¿Se abrió su piel?
- ¿Tenía una erupción cutánea, mordida o una herida abierta?
- ¿Estaba usando una cubierta protectora?
Acerca de la persona infectada (fuente):
- ¿La fuente es VIH negativo o positivo? Podrían estar infectados pero aún no lo saben. Una de cada siete personas que viven con el VIH no lo sabe.
- ¿Ha tenido la fuente una posible exposición al VIH a través de relaciones sexuales con parejas múltiples y/o anónimas, sexo sin condón, sexo anal en el que ambos miembros de la pareja tienen un pene o uso de drogas recreativas, drogas inyectables o metanfetaminas?
Acerca de usted:
- ¿Ha estado expuesto al VIH antes? Si es así, ¿cuándo y cómo? ¿Cuáles fueron los resultados?
- ¿Es usted sexualmente activo?
- ¿En qué tipo de relación se encuentra?
- ¿Está embarazada o amamantando?
- ¿Tiene alguna afección de salud?
- ¿Qué medicamentos está tomando?
- ¿Es alérgico a algo?
- ¿Acepta realizarse la prueba del VIH? ¿Acepta que se documente el incidente?
Usted y su médico decidirán la mejor forma de tratamiento a la exposición. Su médico puede indicarle que tome medicamentos para reducir el riesgo de contraer el VIH. También podría recetarle otros medicamentos para protegerse contra la hepatitis u otras infecciones. Es probable que necesite análisis de sangre para controlar la función de su hígado, riñón y médula ósea.
La profilaxis posterior a la exposición (PEP) para el VIH es un tratamiento para suprimir el virus y prevenir la infección después de la exposición. La PEP debe tomarse dentro de las 72 horas posteriores a la posible exposición al VIH, por lo que es importante buscar tratamiento rápidamente. Los medicamentos de profilaxis pueden tener algunos efectos secundarios. Los síntomas gastrointestinales son los más comunes, e incluyen náuseas, diarrea y dolor de estómago o malestar.
Hasta que se descarte la infección por el VIH, debe abstenerse de la donación de sangre u órganos y participar únicamente en actividades sexuales de bajo o ningún riesgo, incluido el uso de métodos de barrera como los condones. Si está amamantando, debe cambiar y alimentar a su bebé con fórmula.
Aspectos a tener en cuenta
Recibir un resultado negativo en la prueba después de una posible exposición al VIH no significa necesariamente que no tenga el virus. Hay un breve «período de ventana» inmediatamente después de la infección por VIH durante el cual el cuerpo está pasando por un proceso llamado «seroconversión». Esto podría resultar en una prueba de VIH negativa. Durante la seroconversión, su cuerpo está desarrollando anticuerpos contra el VIH para atacar al virus. Usted puede presentar síntomas similares a la gripe, como fiebre, dolor, erupción cutánea y ganglios linfáticos inflamados. La seroconversión suele ocurrir entre 1 y 3 semanas después de la exposición. En casos raros, puede llevar incluso más tiempo.
Debido a este «período de ventana» para la seroconversión, es posible que deba realizarse pruebas de VIH repetidas. Su médico puede indicarle con qué frecuencia realizarse las pruebas. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan volver a realizar la prueba hasta 6 meses después de la exposición.
Es natural tener emociones fuertes después de una exposición al VIH en su lugar de trabajo. Puede sentir ira, miedo, culpa o depresión. Durante el difícil momento del tratamiento de prevención y la espera, es posible que desee buscar apoyo. Pruebe con un programa de asistencia al empleado o un experto en salud mental local.
Preguntas para hacerle a su médico
- ¿Qué considera que es una exposición ocupacional?
- Si me expongo al VIH de la sangre o fluidos corporales en mi lugar de trabajo, ¿cuáles son las probabilidades de que yo me infecte?
- ¿Cuándo y cómo voy a saber con seguridad si soy VIH negativo o positivo?
- ¿Puedo seguir trabajando durante el período de ventana o seroconversión?
- ¿Con qué frecuencia debo volver a hacerme las pruebas?